La salida de Toni Kroos ha dejado un gran vacío en el desempeño del equipo blanco, tanto en las jugadas a balón parado como en el juego en general.

La temporada pasada, el club blanco utilizó el balón parado como su arma secreta. Davide Ancelotti y Francesco Mauri, quienes optimizaron su plan de juego, lograron transmitir lo que el equipo blanco sabía que su equipo era superior en este tipo de acciones debido a dos factores: la habilidad de sus lanzadores y su fuerza aérea. No obstante, la salida de Toni Kroos ha dejado una gran ausencia en el desempeño del equipo blanco y en las jugadas a balón parado. La decisión del alemán ha llevado al cuerpo técnico a ejecutar una orden de búsqueda y captura para identificar a un lanzador que cumpla con todos los requisitos.

Carlo Ancelotti, Davide Ancelotti y Francesco Mauri, en la previa del Clásico en Nueva Jersey.

“Mi cuerpo técnico está trabajando muy bien en esto, yo no porque no me encargo. Tenemos buenos lanzadores y grandes rematadores”, confesaba Carlo Ancelotti la temporada pasada tras dominar su equipo el juego aéreo a su antojo. Y es que de los 129 goles que anotó el Madrid, 10 llevaron la firma del balón parado. Siete en LaLiga, dos en Champions (uno de ellos en la final de Wembley) y uno en la Supercopa de España. Además, para entender la superioridad blanca en este aspecto habría que recalcar que en contra no recibieron ningún tanto. Pero este no es el problema que se han encontrado para la 24/25 porque en defensa no ha cambiado nada, la pieza que falta del rompecabezas es la elección del sustituto del eterno ‘8’ blanco.

Cinco opciones ‘reales’

Ningún otro equipo en las cinco grandes ligas puede decir lo mismo. Una gran fortaleza y solidez pocas veces vista para sacar a relucir el gran trabajo que llevan tiempo realizando en Valdebebas. Lo importante era entregar al futbolista todas las herramientas posibles para que puede actuar de una forma u otra dependiendo del rival. Un trabajo intenso que provocó que el club blanco acabase la temporada sin encajar un gol a balón parado. Único en su especie en el mundo del fútbol sabiendo anticipar los movimientos del rival para minimizar el daño . Y es que la clave fue repetir hasta la saciedad los movimientos para simular lo que se iban a encontrar sus jugadores con los rematadores rivales.

Así las cosas, en la derrota frente al Clásico se vio el primer tanto del Real Madrid a balón parado. Arda Güler puso el balón en el segundo palo y Nico Paz, que había confesado que no tenía que estar ahí, remató en plancha para firmar el 1-2. El centrocampista turco es el sustituto natural de Toni Kroos, quien bendijo su pie izquierdo hace unas semanas. “Su finalización y su zurda son increíbles, todos lo notamos desde el primer entrenamiento”, confesó. La calidad del guante del ’15’ está fuera de dudas, pero su inclusión en el once de Carlo es lo que más dudas genera. Hay que tener en cuenta que Kroos era pieza una insustituible para el italiano por lo que Davide y Mauri lo tenían fácil a la hora de preparar las jugadas a balón parado.

Un caso parecido es el que sufre Luka Modric. El croata es otro de esos futbolistas que han sido bendecidos con un golpeo de balón único. El segundo al mando en las acciones de estrategia cuando el alemán no estaba sobre el terreno de juego, que no solían coincidir al ser ambas las piezas intercambiadas por Carlo en su esquema. Cuando sea titular, Modric será el encargado de poner el balón en juego… así que la misión es encontrar al futbolista para esos momentos.

Un viejo rockero y dos opciones nuevas

Analizando el posible once de Carlo Ancelotti. Las dos piezas que podrían coger el testigo al cumplir con los dos requisitos fundamentales (titularidad incuestionable y buen golpeo) son Fede Valverde y Jude Bellingham. El uruguayo tiene un excelente desplazamiento en largo y, aunque al técnico le gusta posicionarle en la frontal del área para apoyarse en su potente disparo y par evitar contras peligrosas, el nuevo ‘8’ del Madrid ha entrado en todas las quinielas del cuerpo técnico. La opción del inglés tampoco se descarta, aunque Jude tiene mucha inteligencia a la hora de prever por donde caerá el balón y las segundas jugadas . Un gran poderío físico que le ha ayudado a anotar goles a balón parado esta temporada… pero que al tener también buen golpeo, su figura está entre las opciones ‘reales’.

Otra de las opciones que maneja el cuerpo técnico es la de David Alaba, que lleva lesionado desde el pasado mes de diciembre. El austriaco es un defensa con toque y con un guante en su pie izquierdo. Y es que en la sequía que azotó al Madrid a balón parado, no marcaba un gol de falta en LaLiga desde 2021, el central para firmar dos libres directos. En ese momento pareció que el Madrid había encontrado lanzador de faltas oficial, pero todo se fue al traste con una lesión que todavía no ha conseguido dejar atrás. Este año, con la llegada de Kylian Mbappé se acaban esos problemas con las faltas directas. El francés es todo un especialista a balón parado (podría ser otra opción para Davide y Mauri) y siempre ha lanzado los penaltis, aunque este año tendrá que esperar su oportunidad. La jerarquía blanca es clara. Ahora mismo el primer lanzador es Vinicius, que sigue perfeccionando su golpeo en la gira por Estados Unidos, y se antoja complicado que alguien le quite ese puesto.