Mateo Joseph encabeza la victoria de la Rojita con tres anotaciones en 44 minutos. En la segunda mitad, Kazajistán respondió, pero no le permitió empatar.
España superó a Kazajistán en un encuentro que parecía una goleada histórica, pero que terminó con la Rojita solicitando la hora, debido a la reacción del equipo rival en la segunda parte que le permitió acercarse al empate. No obstante, el equipo de Santi Denia continúa imbatible en esta etapa de clasificación donde no sabe lo que significa perder.
Con el pase a la Eurocopa asegurado, la meta de España era añadir los tres puntos y proporcionar un buen espectáculo a los seguidores de La Línea de la Concepción, lugar donde la Rojita debutaba por primera vez. Con esa consigna, los jóvenes de Santi Denia comenzaron a practicar un juego enérgico y ofensivo, y de ello surgieron las primeras oportunidades para España.
Moro ratificó su hito con un centro con rosca que impactó en el segundo palo de Juanlu, deteniendo a Anarbekov cuando Mateo Joseph ya estaba listo para finalizar.
No existían noticias relacionadas con Kazajistán más allá de la frontera divisoria del campo de batalla. No obstante, en el primer intento de cruzarla, marcó. Se trataba de un viaje extenso en el que buscaba a Kenzhebek, el elemento más amenazante del equipo Kazajo. Iniciaba en una posición incierta, pero finalmente logró un disparo con rosca desde la parte frontal, ajustado al palo, frente al cual Cuñat no pudo hacer nada.
El gol, en lugar de debilitar la moral del equipo español, sirvió para fortalecerlo. La respuesta fue instantánea y en ocho minutos, España ya había logrado revertir el resultado con goles de Mateo Joseph, después de un servicio preciso desde la izquierda de Robert Navarro, y Turrientes, de volea desde la frontal.
España tomó las riendas del partido y desmanteló completamente a Kazajistán. Durante la incertidumbre del conjunto bajo la dirección de Mamonov, se sumaron otros dos goles de la Rojita, ambos con la firma de Mateo Joseph.